Todo restaurante se basa en la implantación eficiente de un sistema de procesos y operaciones, que van desde la definición de la política de recursos humanos, la planificación financiera, el marketing, o la producción del servicio,etc. Todos estos procesos deben estar adaptados y ajustados en función del concepto de restaurante, y su adecuada planificación y organización sólo se consiguen si somos capaces de organizarlos de forma conjunta e integrada.
¿Cómo lo hacemos?
Auditamos la situación actual del restaurante en función del siguiente modelo:
Y en función de los resultados empezamos a establecer que actividades, personas y herramientas debemos implementar, mejorar o eliminar. Posteriormente el proceso de mejora se lleva a cabo mediante un plan de acciones de mejora, y un proceso de formación del equipo humano implicado.
Con el objetivo de ayudarte a situar el nivel de eficiencia de tu restaurante responde a las siguientes preguntas:
• ¿Los estándares de servicio al cliente están escritos?
• ¿Existen escandallos y fichas de producción de la oferta gastronómica?
• ¿La política de RRHH está escrita? Y contempla: la política de salarios, el protocolo de introducción de un nuevo empleado, el perfil de su puesto de trabajo.
• ¿Conocemos el número de referencias (platos de cada producto, vinos..etc) vendidas durante la semana?
• ¿Existe un control de recepción de pedidos? (pesaje, temperaturas..)
• ¿Disponemos de los costes de cada plato?
• ¿Analizamos semanalmente el coste de personal?
• ¿Analizamos semanalmente el coste de materia prima?
Un negocio eficiente y rentable debe ser capaz de responder afirmativamente al 100% de las preguntas anteriores.
